Aventuras en Osilandia: O como El Matarreyes se volvió “Ser Jaime”

Mi primera curiosidad. ¿Escribió Martin las escenas Jaime-Brienne previas al Foso? Esa última tenía la obvia marca del pisotón de elefante de Weiss &Benioff, pero las anteriores  quedaron buenas. Mi segunda curiosidad ¿Cómo lo hace Nikolaj Coster Waldau para verse lindo aun desgreñado y harapiento? Ahora vamos a despellejar este episodio.

Una despedida muy emotiva.

Tuvimos lo que no nos dio el libro, un atisbo a lo que ocurre entre cena y partida de Jaime. Jaime le dice a La Doncella que tiene una deuda con ella. Por favor, recuérdenme cuál deuda. Con tanto enredo entre libro y adaptación ya me perdí.

La Doncella lo llama “Ser Jaime” por primera vez, le suplica que cumpla con su palabra y devuelva a Las Niñas Stark  a su madre. Jaime lo promete con todas sus letras. Algo que nunca hizo en el libro y eso es importante porque ahora ya tiene que tener eso en mente apenas llegue a Desembarco.

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¿Qué decir de esa escena? El pobre Matarreyes se quedó sin palabras al oír que Brienne hace lo que no hizo en la tina, llamarlo por su nombre (en el libro no llega a hacerlo sino después que la salva del Foso). Ella también se vio inmensa con esa valentía de quien en momento de peligro sigue pensando en su deber.

Lo único que conservaron de los parlamentos martinianos es la despedida de Jaime y Bolton, con ese “Los Lannister mandan saludos”. Me da escalofríos pensar por qué eligieron esa frase y precisamente enfrente de Brienne. Ayy esos arcángeles que no desciendan al nivel  “culebrón”.

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En el libro, Jaime se “despide” de manera provocadora de de sus torturadores. Aquí es Locke quien lo persigue con burlas, con amenazas veladas al bienestar de Brienne y termina con un curioso “No te corté las bolas”.  (Que nos lleva las escenas de castración de Theon). Jaime no ignora a Locke por soberbia. Hasta el momento del Foso todavía le teme. Algo muy natural entre torturado y su verdugo.

 Jaime descubre que con una sola mano casi no puede subirse al caballo. Qyburn lo ayuda. A mi me cae bien este Maestre. ¿Por qué  se supone que deba caernos mal? Eso se explica en la próxima escena.

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Una lección de Bioética

Lo próximo es Jaime, Qyburn y Patas de Acero (al que nadie nos presentó) descansando en el camino. El Maestre atiende solicito a su paciente. Jaime no puede evitar admirar el trabajo médico de Qyburn, superior al de Pycelle (Oye, Matarreyes, si  Pycelle como médico es tan bueno como yo de bailarina exótica). Pero la astucia Lannister lo hace adivinar que Qyburn es un clon del Dr. Mengele que ha hecho experimentos y vivisecciones y por eso perdió su cadena.

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Qyburn no se ruboriza. Todo lo ha hecho por el bien de la ciencia y de la humanidad. Incluso contraataca amablemente. ¿A cuántos ha matado el Matarreyes? ¿A cuántos ha salvado? Con cara de póker Jaime responde, a todos los habitantes de Desembarco del Rey. Ni Qyburn se sorprende, ni Jaime elabora. ¿Eso significa que su heroico acto ahora será comidilla pública?

Jaime pasa a otro tema, quiere saber si Lord Selwyn planea enviar un rescate por su hija. A ver, momentito, ¿de qué rescate hablan? Brienne va a ser devuelta a Robb, nadie ha hablado de rescate. Qyburn que ha leído el libro le dice a Jaime que Locke no quiere dinero por La Doncella sino que la quiere de “entretenimiento”. Eso galvaniza a Jaime que chantajea a Walton (preséntenlo por favor) y todos vuelven como flechas a Harrenhaal.

Locke, ya aburres hombre.

Lo del oso siguió la dinámica que Weiss&Benioff han impuesto a la relación Locke –Jaime y a las escenas Jaime y Brienne. Locke, con ese bigotito de Stalin, sigue con el cuento de que Jaime es “un hijito de Papi”, pero ya nadie le compra esa pomada como ya nadie se cree que haya razón, motivo o causa para eliminar excelentes parlamentos del libro. Los arcángeles los borraron TODOS. Es como si odiaran los diálogos de Martin.

(newsfury.com)

La escena del Foso sin ser mala fue demasiado rápida, el pobre Bart creo que ni siquiera se murió. Si mal no recuerdo yo vi una foto de Jaime con el hueso en la mano. Aquí el  Matarreyes salta desarmado, entretiene a Bart, El Oso, y finalmente sirve de banquito para que La Doncella huya y pueda rescatarlo a el. Todo en cuestión de segundos.  Casi se podría decir que nuestro Jaime hizo el Oso en todo el significado de la palabra. Bueno, pero así son Weiss&Benioff, prefirieron restarle tiempo a la escena tal como prefirieron que Jaime y Bri no se dijeran nada después de ese momento tan épico. En Jaime-Brienne.org están esperando algún dialogo entre ellos la próxima semana. Yo no.

Lo mejor de la escena. La recuperación de Jaime de su identidad. El pobre está tan desesperado por salvar a La Doncella que se atreve a increpar a Locke por haberle dado a ella una espada de madera. Ofrece pagar todo lo que el maldito desee. Y al final, se da el gusto de reírse de Locke “perdón por lo de los zafiros” y de quitarle a Brienne. Por fin vemos, desde que perdió su mano, a Jaime erguirse y mirar a los ojos al hombre que lo mutiló. Creo que será la última vez que veamos a Locke. A menos que Brienne lo mate en la quinta temporada.

(tumblr.com)

La escena comenzó con Locke y sus hombres cantando “El Oso y La Doncella” y acabó con la música de “las Lluvias de Castemere” indicando el triunfo de la Casa Lannister sobre esos pelafustanes cargados de rencor social.  Me enfureció que Locke se ensañase con alguien tan buena e inocente como La Doncella, solo porque es una dama.  La verdad es que  entre el elogio al imperialismo de Daenerys y el desprecio por las ideas  sediciosas de Locke sobre  castigar a todo aristócrata que pille…Voy a creer que Weiss&Benioff son Republicanos enclosetados.