Mockingbird: GOT 04x07

¿A qué no adivinan en qué momento dejé de pasarme Kleenex por los ojos y sonarme la nariz y comencé a aplaudir como loca? No, no fue cuando Arya le curó la herida al Perro, ni cuando Sansa abofeteó a Robalito, ni cuando Oberyn dijo “seré tu campeón”, ni cuando Lysa voló por Las Puertas de La Luna. ¡Fue cuando reapareció  Hot Pie! Más en serio, también cuando Petyr besó a Sansa. No fue morbo, pero por fin me escandalizan por un buen motivo. No sé, es que tantas sorpresas en una noche. Ni las nalgas de Daario me arruinaron uno de los mejores capítulos en mucho tiempo. Vamos a comentar “Ruiseñor”.

Estoy totalmente impresionada. Concuerdo con Elio García que es el mejor episodio de la temporada y eso se debe únicamente a que Los Arcángeles volvieron al libro (pero tenían que despreciar los diálogos de Martin) y barrieron bajo la alfombra todos los disparates que se inventaron entremedio. Pero concedo que por una noche me hicieron retroceder en el tiempo a una época en que no era shipera, no vivía para ver una nariz danesa, solo gozaba el desarrollo de la mejor obra que he leído en este siglo.

Tyrion necesita un campeón

Comenzamos con un tiernísimo tete-a-tete entre los chicos Lannister. Como era de esperarse Jaime cubre a su hermano de reproches, y aunque Tyrion se da cuenta de que se hundió solito en profundo estiércol, todavía siente orgullo de haber arruinado los planes paternales de desterrar al feo y poner al bonito de semental. Es conmovedor ver a Tyrion confesarle a su hermano que se enamoró de Shae y ver que Jaime todavía no tiene el valor de reconocer su relación con Cersei. Se nota que está bien adiestrado.

Tyrion cree que su hermano podrá representarlo en la ordalía y el Matarreyes debe admitir que no puede matar ni un mosquito con la mano izquierda. Pues será Plan B, y El Gnomo manda a Jaime a buscar a Bronn. Me hubiera gustado que usaran esta escena para recordar a Tysha. La expresión de Jaime al oír a Tyrion hablar de su amor por Shae me pareció un poco culpable.

La Reina y La Montaña

Siguiente viñeta, tenemos una escena rarísima con La Montaña destripando gente. Lo curioso es que parece un episodio de “Espartaco”.  Las victimas están en fila (no sabemos quiénes son ni qué crimen cometieron) y Clegane los ensarta ritualmente como aceitunas en un mondadientes, sin hacer caso de sus súplicas. Esto no ocurre en medio del campo, o en el fragor de una batalla sino en uno de los patios del Palacio Real.

Aparece Cersei impertérrita pisando tripas sin preocuparse de que las vísceras se peguen a su falda. Un poco exagerado. Una mujer tan refinada como ella que no gusta de torneos ni va de cacería, al menos debió hacer alguna mueca de disgusto o taparse la nariz con un pañuelito. Se nota que quieren mostrar a Cersei como una maquina de venganza incapaz de sentir nada. Saluda a Ser Gregor, que ni le hace reverencia ni le dice “Majestad”. Solo ladra “¿A quién hay que matar?”

Arya añade un nombre a su lista

Pasamos a otra triste escena en la cual Arya y Sandor Clegane (creo que deberíamos presentarlo como “El Hermano Bueno de La Montaña”) encuentran un campesino  herido en el campo. El hombre está agonizando. Aun así se las arregla para sostener una larga discusión en la que lo evidente es que El Perro y su mascota le ofrecen una muerte rápida y el agonizante quiere aferrarse a la vida. 

No sé si Los Arcángeles se habrán dado cuenta que su escena es una apología de la eutanasia. El momento cumbre es cuando Arya le revela su verdadero nombre al moribundo. Sandor le da un trago de agua, disculpándose por no tener vino, y le atraviesa el corazón con su daga. Le explica a Arya que así se mata a un hombre de manera más rápida e indolora.

No alcanzo a secarme las lágrimas cuando ocurre una escena que Elio describió muy bien como “surrealista”. De entre la bruma salta algo que muerde al Perro en el cuello. ¿Un licántropo?  ¿Un vampiro?   ¿Un Walking Dead? No, es Mordedor al que Clegane rápidamente despacha con su espada. Esperen, sin Mordedor... ¿Quien va a morder a Brienne?

Biter no viene solo, y en medio de la niebla, Arya, Sandor y Rorge sostienen un extraordinario intercambio. Arya lo reconoce, es uno de los hombres en la jaula con Jaqen H’rgar. Rorge informa al Perro que hay una recompensa por su cabeza, y que Joffrey ha muerto. Nadie parece muy impresionado por esta última noticia. Sandor le pegunta a Arya si este individuo es parte de su lista. “No lo es”, le responde la niña, pero solo porque no le sabe el nombre. “Rorge” dice el tonto y Aguja se le entierra en el corazón.

Sin novedad en El Muro

Yo debería tener mi propia Lista Negra y a la cabeza está Ser Allisser. No solo es un engreído irresponsable que se niega a seguir las instrucciones de Jon de sellar los túneles, además manda enjaular a Fantasma. Cerdo, espero que tengas el destino de Rast.

Los desnudos de rigor

Después de tantas escenas emocionantes, agradecí el relleno cómico y verle las nalgas a Daario Naharis fue sumamente divertido. Sobre todo porque es la manera de Los Arcángeles de darnos el gusto a las mujeres. El mismo Elio lo confirmó. ¿No nos quejamos de escenas con minas desnudas y hombres vestidos? Ahí tienen, quejosas. Ok, lo hicieron, Dany vestida, Daario sin pantalones, pero me gustaría darles un “Erotismo Femenino 101”. A las mujeres nos gusta más el contexto que un close-up tan anónimo de un popi que podría pertenecerle hasta al barrendero. Si fuera por esas también me excitaría con el torso desnudo de La Montaña. Yo soy fanática de machos descamisados, pero machos que me gusten. Y el pobre Daario, con sus flores baratas y su culo al aire, no me llama la atención.

El contexto es el siguiente.  Daario se le mete en el cuarto a su reina. Le trae un paupérrimo ramo de flores y dice que no quiere ser policía y patrullar las calles del reino. El solo sabe hace dos cosas: matar y cortejar. Dany se toma su copita y lo manda encuerarse.

No nos lo muestran en acción, pero ya sabemos lo que hicieron. Como lo sabe Ser Jorah que se encuentra al mercenario a medio vestir en el pasillo. Jorah no hace reclamos a pesar de que su Khaleesi no oculta el buen revolcón que acaba de darse, ni que el sexo la hace más sanguinaria. Como premio a los esfuerzos de Daario, lo mandará a Yunkai a escabechar a todos los esclavistas. La Madre de Dragones sigue empeñada en crear un mundo nuevo en el que sus conquistados tienen dos opciones: cumplir su voluntad o ser crucificados. Esperen  ¿No era así como se comportaban los romanos? Y ya vimos como les fue.

Jorah tiene la decencia de recordar que también vendía esclavos en sus años mozos. Eso no cambia de opinión a la Khaleesi. Ella cree que él pudo redimirse, pero los demás no. Jorah recuerda que si Ned Stark hubiese pensado como Daenerys, él no estaría ahí. Eso por fin hace mella en la necedad arrogante de La Madre de Los Dragones. Decide mandar a Hizdahr (ni el nombre recuerda) como “su embajador” para que cuente en Yunkai cómo se porta Daenerys de La Tormenta con los Amos. Para agradar a Jorah lo manda darle la buena nueva a Daario. Volverá a patrullar calles y ha sido El Oso Mormont quien la ha hecho cambiar de opinión. Que no se crea el mercenario que por una noche con su reina ha adquirido poder. Muy bien, Daenerys.

 Como este es un show que cree en la paridad, después de mostrarnos el trasero de Michel, nos pasan las tetas de Carice. A la holandesa le gusta andar en bola, pero igual esta escena estuvo bien WTF, aparte de no contribuir nada. Selyse entra a ver a la Mujer Roja y la encuentra bañándose. No solo Melisandre no salta de la tina y se cubre  como señal de respeto a su soberana, más encima la manda a traerle sales de baño Y luego pasea sus curvas descubiertas ante la pacata Selyse.

 Dicen los reseñadores (acabo de darme cuenta que los recappers, con pocas excepciones, son varones) que asi Meli demuestra su “poder” sobre la esposa de Stannis. Cuénteme una de vaqueros ahora. El poder de Melisandre se manifiesta en que es inmune al veneno, que tiene visiones, que mata reyes con hechizos, no que mueve la cola ante Selyse (aunque más de uno anda viendo un dúo lésbico ahí).

Lo único que sacamos en claro de esta escena totalmente fuera de lugar (aparte de que ya se notan un poco caídos los glúteos de Carice) es que Selyse no quiere llevar a su hija al Norte, y Meli si, porque la “necesitan”. Ya nos imaginamos barbacoa de Shireen, o algo que involucre sanguijuelas y sangre real.

Confidencias perrunas

Por fin salimos de tanta paja molida y volvemos al Perro y a La Loba. Escena increíble en que por primera vez vemos a Sandor Clegane desolado. Le duele mucho la herida del cuello. Mordedor no debe ser amigo del dentífrico y esa mordida debe estar infectada.  La noticia de que han puesto un precio a su cabeza  y el dolor deprimen a Sandor que se arrepiente de haber secuestrado a Arya y la culpa de sus desdichas. La pobre chica intenta cauterizar la herida de su captor, pero lo peor que puede hacer es poner al Perro en contacto con el fuego.

Y de pronto, Sandor hace lo imposible, se abre y se confiesa. Le cuenta como Gregor lo quemó, solo porque le tomó un juguete. Lo mas terrible, lo que mas le duele es que su padre defendió a su primogénito e inventó un cuento de que la cama de Sandor se había incendiado. Por primera vez, Arya se da cuenta que hay algo que los une. Ninguno tuvo una niñez normal. Incluso ella ha tenido más suerte, con hermanos que le regalan espadas. Agotado por su imprevista confidencia, Sandor permite que Arya le limpie y suture la herida.

El retorno de Hot Pie

Ahora nos toca ir un poco cerca de ahí. A una posada donde Brienne come con gran gusto (curioso, en el libro es muy espartana en su consumo de alimentos) pero impide que Pod siga bebiendo. Ese pequeño gesto de estirar el brazo y retirarle la copa al escudero (bravo Alik Sakharov) deja en claro que tipo de relación es esa. No es un compinche deteniendo a un amigo, no es un caballero ordenando al inferior, es una madre dictando reglas a su hijo. Pod no alcanza decir nada porque llega el camarero a ver si los comensales están satisfechos. Y todos gritamos ¡”Pastel Caliente”! Y eso que nos contaron que regresaba esta temporada. Entonces todavía pueden aparecer Merivald y Ser Hyle.

Brienne, de nuevo alejándose de la mujer seria y cautelosa del libro, le cuenta al camarero que andan buscando a Sansa Stark (Lannister). Hot Pie deja su locuacidad a un lado, se pone serio y un zipper en la boca. Dice no saber nada de traidores. El solo sabe de salsas y pasteles.

Mas tarde cuando ensillan sus caballos, Pod tímidamente aconseja a “Miladi”. Sansa es una fugitiva, los Stark son traidores, mejor no decir que la están buscando. En eso llega Hot Pie. Les cuenta que conoció a Arya, que la última vez que la vio iba junto al Perro Clegane, ambos prisioneros de La Hermandad. Les da un pancito en forma de lobo, un regalo para su amiga...si la encuentran.

Brienne y Pod se ponen en marcha y aquí estoy confundida. No supe qué derrotero tomaron, pero los reseñadores dicen que van camino al Valle. Ok, no van al Muro, ¿pero no seria mejor buscar a La Hermandad o a Sandor Clegane primero? Y mi gran duda, ¿Si Mordedor y Locke están muertos a quién va a comerle una oreja La Doncella ahora?

Ser Bronn

Han pasado los días y por fin Ser Bronn de Las Aguas Negras se digna a visitar a su amigo y ex patrón en la celda. Apenas Tyrion ve al mercenario con ropita nueva se da cuenta que ya es parte de la nómina de Cersei. Todo lo que sigue es canon. Bronn se va a casar con la rica y retrasada heredera Lolly Stokeworth, cortesía de la amable ex Reina Regente.

Lo que me gustó de esta escena es que quedó clarísimo que Bronn no se vendió por una esposa rica, ni un traje nuevo, ni por unplato de lentejas. Los ha aceptado porque sería tonto no aceptar, pero la razón por la que no será campeón de Tyrion es más valida. No puede vencer a La Montaña y poco ayudará a Tyrion dejándose matar. El Gnomo comprende perfectamente, aunque le destroza el alma saber que ya no hay plan B. Se despiden. ¿Será la última vez que veamos a Jerome Flynn? ¿No irá de viaje con Jaime?

El Tercer Visitante

Esa noche, en la oscuridad de su celda, Tyrion recibe a un tercer visitante. La Víbora Roja comienza informándole que desde su llegada a Desembarco del Rey que lo corteja una rubia despampanante. Oberyn se ha dado cuenta perfectamente de las intenciones de Cersei. Dice algo interesante. La Reina está tan acostumbrada a fingir emociones que ya se las cree ella misma. Acto seguido le cuenta una historia escalofriante.

De niños, Oberyn y Elia fueron huéspedes de los Lannister cuando Tyrion era un recién nacido. Ya por entonces  circulaba el rumor de que Joanna había muerto al parir un pequeño monstruo. La imagen de Cersei por aquel tiempo (recordemos que tenía solo cuatro años) ya es diabólica. Oberyn la pinta exhibiendo a su hermanito como a un freak de feria, torturándolo (desde entonces sabia como agarrarles las pelotas a los machos) y deseando su muerte. Conmueve saber que Jaime desde ya protegía a Tyrion.

No me creo el cuento de que Cersei odiase al Gnomo por quitarle la madre. Recordemos que a esa edad, jugaba “a los caballitos” con su mellizo. Joanna intentó separarla de Jaime. ¿Por qué Cersei iba a querer a quien la privaba de un gran placer? ¿U odiar a quien la libró de la única persona que conocía su secreto y podía corregirla? Si Tyrion hubiese sido un rubito guapo como Jaime, Cersei también lo hubiera seducido. Lo que no soporta de su hermano, lo que la avergüenza y le da asco, es que físicamente es imperfecto.

Pero volvamos a Oberyn. Termina su cuento con una moraleja, desde la cuna, Tyrion ha sido odiado por su hermana quien siempre esperó que muriese. “Tarde  o temprano, Cersei siempre consigue lo que quiere” rumia el reo. “¿Pero y lo que quiero yo?” pregunta Oberyn. El quiere justicia. El quiere venganza. Y comenzará con el asesino y violador de su hermana: Gregor Clegane. “Yo seré tu campeón” anuncia a Tyrion, y el rostro de alivio del Gnomo es todo un poema.

La luna de miel más breve de la historia

Faltando poco para cerrar la noche, llegamos al Valle donde Sansa ha construido una replica de Invernalia con nieve. Llega su primito que se pone admirar la maqueta. Se sorprende al saber que en su antiguo castillo, su prometida no tenía Puertas de la Luna. Le promete que cuando se casen y recuperen Winterfell le construirá esas puertas para lanzar por ahí a todos los enemigos de Sansa. Lady Lannister sonríe. Ya me imagino que mentalmente está redactando su lista negra.

Robín intenta embellecer el castillo construyéndole una Puerta de la Luna y termina rompiéndolo. Sansa llora y lo acusa de haber arruinado su construcción. Indignado, Robalito monta una de sus famosas pataletas (pero no sufre un ataque de epilepsia con en el libro). Sansa le planta una cachetada. Robalito huye aullando a acusarla con su madre.

(enquire.com)

Aparece Littlefinger que ha sido testigo de la escena y tranquiliza a Sansa. Hace rato que Lysa debía haber abofeteado a su engendro. Intenta arreglar el castillo, pero Sansa se ha vuelto astuta, no confía en su “tío” Petyr. Vuelve a preguntarle por qué mató al Rey. Petyr le dice que siempre queremos vengar a los que dañan a los que amamos. Todo vuelve siempre a Cat. Meñique habla de su amor por Catelyn. Dice que en un mundo mejor Sansa hubiera sido su hija. Ahí cambia el tono, no viven en un mundo mejor. Sansa no es su hija. “Eres más hermosa que tu madre” dice Lord Baelish y antes que Sansa diga “miau”... ¡La está besando! Mis ojos no daban crédito. Los Arcángeles se atrevieron. “¡Lord Baelish!” exclama la escandalizada Lady Lannister. “Llámame Peter” dice Meñique. Y pensar que se trata de un recien casado. 

Ultima escena. Tía Lysa convoca a su sobrina a su sala de torturas. Sansa comienza con disculpas. No quiso pegarle a Robalito, pero...Lysa la hace callar. No es ese el motivo de su ira. La vio besuqueándose con su marido.  “Puta” le dice y enfurecida la arrastra hasta Las Puertas de la Luna. Ayy, por una vez Meñique hace una entrada oportuna. Sabe conservar la calma. Le promete a su mujercita que mandará a la manzanita tentadora “muy lejos”. Lysa suelta a su presa que se encoge en un rincón. Llorando, Lady Baelish acusa a su marido de traicionarla. Después de todo lo que ha hecho por él. Hasta ha matado. ¿Escuchas Sansa? toma nota.

Petyr le habla con dulzura: “Mi tonta esposa celosa. Solo he querido a una mujer”. Lysa levanta sus ojos llenos de esperanza. “Tu hermana” dice el cruel marido y añadiendo injuria al insulto hace volar a la “mujercita mala”. ¡Qué manera de terminar la luna de miel!

(vanityfair.com)

¿Y ahora cómo explicarán este  femicidio? Muy buen capítulo, pero si revisan mi recap está lleno de interrogantes. ¿Cuáles son las suyas?