The Laws of Gods and Men: GOT 04x06

No pensé que me iba a caer tan bien Hizdahr zo Loraq. No pensé que Drogón estuviera tan grande. No pensé que Pete Dinklage pudiera superarse a si mismo. ¿Y cuántas veces oímos en el mismo capitulo el título “Rey de los Ándalos y de Los Primeros Hombres”? Hora de reseñar “Las Leyes de los Dioses y de los Hombres”.

No tuvimos Muro, no tuvimos  Arya, No tuvimos Nido de Águilas, y Yara Greyjoy bien pudo quedarse en casa, pero reapareció Salladhor Saan. Vimos lo que se ahorra Daenerys en comida de mascotas, y lo difícil que es pedir un préstamo en Braavos.

Comenzamos  con la imagen del yate real de Stannis Baratheon pasando por la entrepierna del Titán de Braavos. Todo  para que el Soberano y su Mano vayan a hacer antesala por horas, hasta que los banqueros se dignan recibirlos y ofrecerles un asiento, sin cojines, sin café, sin siquiera un caramelo de menta.

Stannis es presentado. “El Primero de su Nombre, Rey de Los Ándalos y de Los Primeros Hombres”. Tycho  (Mark Gatiss), el director del banco, lo corrige. Hasta donde sabe, el primero de su Nombre, Rey de Los Ándalos, etc. se llama Tommen y se sienta en El Trono de Hierro. De nada vale el alegato de Stannis sobre sus derechos de sangre y sobre la bastardía de su supuesto sobrino. Ha pasado a las filas de los reyes mendigos y debe soportar el trato humillante que recibió Daenerys en Qarth. Al menos a ella le regalaron vestidos y la invitaron a un par de cocteles.

Stannis indignado se prepara a retirarse, pero Davos tiene la última palabra. No lo humilla que le recuerden que fue ladrón y pirata. Se quita el guante y por primera vez vemos sus dedos amputados. Esa es la muestra de la justicia de Stannis, de su carácter, de sus principios, eso es su colateral. Les recuerda que Tywin es viejo. ¿Qué ocurrirá tras su muerte? ¿Puede confiar el Banco de Hierro en un  regicida, una loca borracha o un mocoso?

La siguiente viñeta nos devuelve a Salladhor Saan en una piscina rodeado de tetas (obligatorio elemento de esta serie). Llega Davos y le entrega un talego de monedas. Su sueldo por comandar La Marina de Stannis. El Banco de Hierro tiene un nuevo cliente.

Vimos tetas, ahora nos toca ver nalgas. Las de Miranda que lo está  pasando bomba arriba de Ramsey Snow. Entretanto, Yara Greyjoy y sus muchachos escalan las almenas de Fuerte Terror. Matan a los guardias y exigen que otro los lleve a las perreras donde guardan a Theon. Pero Theon ahora es Hediondo, no reconoce a la hermana (peor aun, la muerde), no quiere salir de su jaula. Sus gritos alertan a Malandrín que llega en pose de General Monroe con espadas en cada mano. Sin embargo, los hombres de Yara son mayoría. ¿Pero quién necesita hombres cuando se tienen perras? Un ademan de Ramsay de abrir la perrera y la Pandilla Greyjoy huye.

Cuando Yara llega a su bote y le preguntan por Theon responde “Mi Hermano esta muerto”. ¿Fue necesaria esta escena aparte de servir para que los actores cobren un sueldo? Supongo que si. Explica porque los Greyjoy se desentienden de Theon y confirma a Ramsey que “Hediondo” le es leal. Igual, ¿huiría Yara de unos perros? ¿Dejaría asi como asi Ramsey que se les escape otro posible rehén?

Como recompensa a la lealtad de su mascota-esclavo, Ramsay le permite tomar un baño caliente y luego le dice que para ayudarlo tendrá que fingir ser otra persona. “¿Quién?” pregunta el atemorizado eunuco. “Theon Greyjoy. Alguien que no eres tu”.

Pasamos a las colinas de Meereen donde un pastorcito nota que algo asusta a sus chivos. De un costado de la colina emerge un Drogón del tamaño de un bote salvavidas. Saca su lanzallamas personal y se prepara una rica barbacoa de cabrito. El chiste de Weiss&Benioff es a costa de los Lectores esta semana. Nos hace creer que también ha asado al pastorcito. Pero no es asi.

Acto seguido nos encontramos en el salón del trono de la pirámide de Mereen. En una cúspide de escaleras se sienta Daenerys, La Primera de su Nombre, Reina de Los Ándalos y Los Primeros Hombres, La Que no Arde, Madre de Dragones, etc., etc. Si fuera por apelativos, ya Daenerys les ganaba a todos sus rivales.

Al pie de la escalera aparece el dueño del rebaño asado. Trae restos de un chivo carbonizado. Dany le resta importancia a que los dragones anden devorándose ganado ajeno. Asi no va durar mucho la ganadería en ese reino. Me recuerda a esos dueños de mascota que a la hora del almuerzo sueltan a sus perros a la calle para que se busquen solitos el alimento. La Madre de Dragones ordena que se le restituya al pastor el doble del valor perdido. El pastor se va dando alaridos. No supe si estaba contento  o era un ingrato que no quedó satisfecho con la justicia salomónica de la Khaleesi.

El próximo suplicante es Hizdahr zo Loraq. Admito que me sorprendió lo hecho por Bryan Cogman. El personaje del libro es un pavo real insufrible, aquí lo vemos humilde, pero digno. Sin ser obsequioso, certifica su lealtad a la nueva reina. Sin ser vanidoso, confiesa pertenecer a una familia noble, pero constructiva. Su padre era arquitecto y diseñó el edificio en donde se encuentran. Daenerys, que ha estado muy cortes y contenida, demuestra sincero entusiasmo por la pirámide y expresa interés en conocer al arquitecto.

“Ya lo conocéis, Majestad” dice Hizdahr. Fue uno de los crucificados por ella. Dany comienza a perder la compostura. Habla de un castigo justo y recuerda la masacre de los niños esclavos. Hizdahr revela que su padre se opuso a la masacre. Los Amos no lo escucharon y  terminó pagando justo por pecador. Daenerys sigue con su perorata, segura de tener la razón. El suplicante se explica. No ha venido a criticar a su reina. El es solo un hijo que ruega por el derecho de enterrar a su padre. Finamente, Dany le otorga ese derecho.

Viajemos ahora a Desembarco del Rey a la primera reunión del Pequeño Consejo. Ohh, Tommen no ha venido. Malo, malo, se nota que el nuevo rey se llama Tywin. Están presentes Cersei, Varys, Mace Tyrrel y Oberyn. La Vibra Roja anda gruñón, estas reuniones son muy tempranas para quien se pasa las noches en francachelas. Pregunta si al menos lo nombrarán Amo de algo. Mace se apura en recordarle que ahora el será El Amo de los Barcos. Eso crees tú,  Panzón. Lo único que veo es que tu consuegro te tiene de amanuense y te manda a buscarle su tintero.

Lo importante son las noticias de Varys. Se ha divisado a Sandor Clegane en Aguas Dulces y matando hombres del rey. Noten que nadie se molestó en contarle a Varys que Arya anda con El Perro. Tywin ofrece una gran recompensa para quien se atreva a matar al que su hija describe como un “cobarde traidor”.

Lo próximo son noticias de Meereen. Varys anda preocupado, Daenerys tiene dragones. “Bebés dragones”, agrega Cersei despectiva. La Araña sigue su enumeración. Daenerys tiene tres dragones, un ejército de Inmaculados y está siendo asesorada por dos sabios caballeros: Ser Jorah Mormont y Ser Barristan Selmy. El eunuco no puede evitar lanzarle una indirecta a su reina. Parece que Ser Barry no tomó bien su despido de La Guardia Real. Cersei se encoje de hombros. Selmy era muy viejo para proteger a Joffrey. Hubo que mandarlo a pastar. Su padre la corrige. Jeffrey no fue asesinado bajo la guardia de Ser Barristan. Mm, mejor que le pasen una copita de Merlot a Cersei y que se quede calladita.

Sin embargo, tampoco me parece brillante lo que dijo su padre. Le echó la culpa a la ineptitud de Jaime por la muerte de Joffrey, olvidando que El Rey Robert murió en presencia de Ser Barry. Pero sigamos con Daenerys.

Tywin se da cuenta que tendrá que contender con la Khaleesi, por la fuerza si es necesario. Recuerda (y nos recuerda) que Jorah era espía de Varys. La Araña admite que El Oso Mormont es ahora incondicional de La Madre de Dragones. La decisión final es tratar de infiltrar la Corte de Meereen y llevar a Dany una de esas infames cartas de Tywin... Ohh, asi lo van a hacer. ¡Échenle la culpa a Tywin de la caída del Oso!

Por fin nos acordamos de Tyrion. Jaime lo visita y saca a pasear. Bueno, lo escolta hasta el tribunal (hey, si lo sacó a pasear ¿No?) Tyrion no puede creer que su hermano insista en esposarlo. “Es lo que quiere Papi” dice Jaime-Chapulín-Rhaegar (Rey de los Proscastinadores). “Y no debemos defraudar a Papi” responde su agudo hermano menor.

Vemos a Tyrion entrar a la sala repleta donde tendrá lugar su juicio. En el camino alguien grita “Matarreyes” y me costó dame cuenta que se referían al Gnomo. Creí que saludaban a Jame. El susodicho conduce a su hermano hasta el banquillo de los acusados y se escurre a su rincón acostumbrado.

Comienza un circo, el ejemplo de Kangoroo Court mas evidente que haya visto. El acusado no tiene derecho a la palabra, a presentar testigos a su favor, ni siquiera tiene abogado. Todo se reduce a testigos de la fiscalía. Se suceden los testimonios de Ser Meryn (si, el de la armadura,el que mató a Syrio,  el que le pegaba a Sansa), de Pycelles, de Cersei y (sorprendentemente) de Varys.

Todos dicen la verdad, la ristra de amenazas que El Gnomo lanzase a Joffrey son ahora publicadas y con megáfono. El problema es que esas amenazas son sacadas de contexto y distorsionadas por un par de mentirijillas. Tywin lo sabe y no le importa. ¿Tanto quiere ver a su Gnomo muerto? ¿Cersei no se da cuenta que si debe mentir para asistir a la ejecución de su odiado hermano es que la culpabilidad de Tyrion no es tan fehaciente?

Tyrion detiene a Varys. Su padre le permite el lujo de una sola pregunta. Tyrion le recuerda al eunuco sus palabras tras Aguas Negras. Como no olvidaría que Tyrion salvó la ciudad. ¿Lo ha olvidado? La Araña lanza una enigmática respuesta. Su memoria no le permite olvidar. Hay quien ve en esto un foreshadowing de su colaboración en el rescate del enano, pero en el libro Varys lo hizo a regañadientes. Jaime lo tuvo que perseguir espada en mano para que lo ayudara.

Solo tres personas en la sala saben que Tyrion es inocente y se dan cuenta de la pantomima de la que son espectadores. Uno es Oberyn que es el único que se atreve a hacer preguntas inteligentes a los muy comprados testigos. La otra es la Reinita Viuda. Se la ve incomoda y tal vez culpable. Por amor a ella, su familia mató a Joffrey. Por odio, Los Lannister dejarán que muera un inocente de su propia familia.

El último en notar la injusticia que se desarrolla ante sus ojos es El Matarreyes. Por fin Jaime se vuelve activo. Durante el receso va a ver a su padre y le presenta una oferta de esas que no se pueden rehusar. Si Tywin evita la ejecución de Tyrion, él, Jaime, abandona la Guardia Real, renuncia a sus votos, se casa con “la mujer apropiada” (mi candidata es Brienne de Tarth) y le dará nietos que perpetúen el apellido Lannister. No ha dicho la última palabra y Tywin lanza un “Hecho” Me dio la impresión que toda esta faramalla era para conseguir ese resultado. Jaime casado y en Casterly Rock, y Tyrion en El Muro.

Ahí me di cuenta de una cosa. A Jaime no le duele la muerte de Joffrey. Nunca lo vio como hijo por razones que conocemos los Lectores. Su corazón está dividido en dos amores: Cersei y Tyrion. En ese momento el último sobrepasa al primero, porque es un inmenso sacrifico  el que Jaime ofrece hacer para salvar a su hermano.

Jaime regresa donde su hermano, le dice que después del veredicto apele a la misericordia del tribunal. Que su ejecución será conmutada y terminará desterrado en Castillo Negro. Tyrion recuerda que esa promesa también se le hizo a Ned Stark.” ¿Confías en mí?” Pregunta Jaime. Nunca llegamos a saber la respuesta Nunca sabremos si Tywin fue sincero porque aparece la guinda del pastel.

Por el pasadizo se siente el taconeo de Shae, la Traidora. Tyrion queda boquiabierto. La dama de Lorath también abre la boca pero para contar la mentira mas gorda de ese día. Como criada de Sansa y amante de Tyrion sabe por seguro que Lord y Lady Lannister planearon el regicidio. Era la prueba exigida por Sansa para consumar su matrimonio.

Sigue una desagradable parodia de los tres testimonios. Shae cuenta todo tipo de detalles íntimos de su relación, combinando verdad con mentira. Tyrion no aguanta. Llorando le suplica que se calle. Ella lo mira con desprecio y le recuerda: “Yo soy una puta”. Ahí todos comprendemos que no hay mayor furia en el infierno que una mujer despechada. ¿Pero es solo despecho lo que lleva a Shae a exigir la cabeza de Tyrion y la de Sansa que nunca le hizo daño?

Tyrion grita que quiere “confesar”. Ayy, Tywin cae en la misma trampa que Lysa Arryn. Tyrion confiesa que es un “Enano”. ¿No es eso por lo que lo juzgan? ¿Por lo que ha sido juzgado desde su nacimiento? No mató a Joffrey, pero gozó de su muerte más de lo que ha gozado follando putas. De Claudio se vuelve un Calígula. No llega a decir que quisiera que sus enemigos presentes tuvieran una sola cabeza para decapitarlos de un tajo, pero dice desear poder envenenarlos a todos. Les grita que los odia y termina exigiendo un juicio por combate. Y yo sin aliento, ¡qué actuación! Aunque sabía lo que pasaría y el desenlace igual me agarró de sorpresa, me dejó suspensa.

La próxima semana volvemos al Valle, y me temo que veremos la muerte de la nueva Lady Meñique. También veré a mi Meli adorada y a lo mejor conoceremos al campeón de Tyrion. ¿Qué les pareció el capítulo?