Estaba fabricando una lista de películas y libros para
regalar en Navidad, cuando caí en cuenta que el mejor regalo (de ese tipo)
navideño para adultos y niños se puede
ver en ambos formatos, papel y pantalla. Me refiero obviamente a El Maravilloso Mago de Oz de Frank L.
Baum.
Últimamente, (como si tuviera tanto tiempo) he estado
pensando en los primeros esfuerzos cinemáticos de capturar nuestro género
favorito y en cada lista o recuento me
tropiezo con el famoso Mago. Efectivamente, antes del clásico de Judy Garland,
hubo dos versiones del cine silente, una de 1910 y otra de 1925, aparte de cortos
y adaptaciones otras obrase de la franquicia creada por Baum, tales como una
adaptación de 1914 de The Patchwork Girl of
Oz o de The Land of Oz (1932) una
precuela a las aventuras de Dorothy y Toto. Pero es el consenso que no hay
mejor, o más bella, versión que la de 1939.
Sin embargo, Victor Fleming no hubiera tenido nada que
dirigir ni Noel Langley nada que escribir si no existiese la novela. Un detalle
que muchos no conocemos es que tras
publicar The Wonderful Wizard of Oz (en 1900,) Baum lo seguiría con catorce
novelas que tenían lugar en La Tierra de Oz. Tras su muerte la serie fue
continuada por Ruth Plumly Thompson que fue contratada por los editores de Baum.
Y por supuesto que, desde 1956 (año en que el libro se convirtió en dominio
público) ha existido toda una corriente de literatura infantil y adulta,
escrita o audiovisual, que utiliza los personajes y universo creados por Baum.
Se puede decir que Baum fue el J.K. Rowling de su época y
que La Tierra de Oz es un equivalente a Hogwarts y otros espacios donde
transita Harry Potter. Mucho antes que Rowling, Baum también creó un mundo alternativo
dotado con geografía y especies propias. Y me imagino que tal como existen
Hogwartianos y Potterianos, hace más de un siglo que debe haber “ozioanos”. Sin duda se les puede encontrar en las inscripciones
del Interational Wizard of Oz Club. Esta institución fue fundada en 1956 por un
niñito de trece años llamado Justin Schiller. Hoy cuenta con centenares de
seguidores de todo el mudo. El Club posee un inmenso archivo de material
relacionado con la franquicia, publica una gaceta The Baum Bugle y mantiene
tres convenciones anuales.
Para acabar con las comparaciones, como Harry Potter, El
Mago de Oz tiene el triste honor de haber sido perseguido por el
fundamentalismo cristiano. En 1986, seis familias fundamentalistas pusieron una
demanda legal para que se prohibiera la lectura
del libro en las escuelas de Tennessee. El juez dio permiso para que los
alumnos cuyas familias criticaban el libro pudieran ser excusados de la lectura
obligatoria de El Maravilloso Mago de Oz.
Lo criticable del libro, para los fundamentalistas, es obviamente el retrato
positivo de las brujas, el enseñar que las virtudes son desarrolladas por el
individuo y no son don divino (¿?), promover la igualdad de los sexos (¿????) y el
hecho de que los animales en el cuento son parlantes (WTF?)
Por suerte, la mayoría de los creyentes de todas las
religiones podemos ver las virtudes del libro, su profunda lección moral y
admirar la maestría de Baum un hombre que siempre creyó en D-s, pero que
consideraba que las decisiones y asuntos de la fe debían ser dictados por la
moral y madurez de una persona no por instituciones religiosas.
Pero de una vez examinenos el argumento, que no me
sorprendería que todavía haya gente que no lo haya leído o se haya quedado con
alguna versión fílmica dentro y fuera del canon impuesto por Baum.
Dorothy es una niña
de Kansas que es arrastrada, junto a su perrito Toto y a su casa, por un
tornado hasta la mágica Tierra de Oz. En 1879, Baum había leído en un periódico
sobre una mujer llamada Dorothy Gale a la que un tornado había arrastrado con
resultados fatales. Eso podría haberlo inspirado. Sin embargo, la creación de Dorothy
(cuyo apellido es revelado solo en libros posteriores) fue una manera del autor
de inmortalizar a una sobrinita muerta que llevaba ese nombre.
La Tierra de Oz es una isla-continente situada en algún
punto del Pacifico(al oeste de California como indicará Baum en otro libro) lo
que lleva a deducir que estaba pensando en Australia. En Strine (slang australiano) Australia es llamada “Oz”.
Una vez en Oz, la casa de Dorothy aterriza sobre la Bruja
Mala del Este. Muerta por el impacto, la hechicera deja de tiranizar a los
Muchkins, una raza liliputiense que aclama a Dorothy como su salvadora. Aparece
Locasta, La Bruja Buena del Norte (Glinda aparece después). Regala a Dorothy
unos zapatitos plateados (no rojos como en el filme) y la manda a la Ciudad
Esmeralda a consultar con El Mago de Oz como regresar a Kansas.
Así Dorothy y Toto emprenden el viaje por El Camino de Ladrillos Amarillos. Un viaje que se convierte en el road trip por antonomasia, a medida que se les agregan fabulosos compañeros de viaje como El Espantapájaros, El Hombre de Hojalata y El León Cobarde. Dorothy los convence de escoltarla hasta Emerald City donde el Mago les conseguirá lo que cada uno desea. Un cerebro para el Espantapájaros, un corazón para el Tin Man y valentía para el timorato León.
Tras muchas aventuras, llegan a la presencia del Mago. Cada
uno tiene una entrevista separada con el Poderoso Oz quien presenta un rostro
diferente a cada solicitante. El Mago les exige, a cambio de concederles los
pedidos, que destruyan a la peligrosa y Malvada Bruja del Oeste. Los amigos
emprenden un nuevo viaje hasta el castillo de la Bruja. Tras sobrevivir todas
las trampas de la villana, son
capturados por la hechicera que pone a Dorothy a trabajar de fregona y logra
robarle una zapatilla mágica. Indignada, Dorothy le arroja un balde de agua que
derrite a la villana. El escuadrón de Monos Voladores, le agradece a Dorothy
haberlos salvado y le ofrecen su ayuda para problemas futuros.
Dorothy y sus amigos regresan a exigir su recompensa, todo para
descubrir que El Mago de Oz es un miserable humano que estafa a todo el mundo
fingiéndose poderoso. Aun así, y aquí esta lo mejor del libro, Oz les demuestra
que, a su manera, cada uno ha conseguido lo que desea ya que se ha vencido a la
Bruja con una combinación de inteligencia del Espantapájaros, del corazón del
Tin Man y del coraje del León.
Dorothy quiere regresar a Kansas, pero cuando una chambonada
del Mago (y de Toto) la privan de la ayuda de Oz, deberá coger camino
nuevamente, ahora para buscar a Glinda,
La Bruja Buena del Sur. Con ayudad de los monos y de otros entes fantásticos,
el cuarteto (+Toto) sobrevive una travesía del desierto plagada de obstáculos.
Glinda los recibe y le dice a Dorothy que debe entrechocar sus talones tres
veces y así volverá a Estados Unidos con sus tíos. De esa manera acaba el
libro, con Dorothy de vuelta con su familia aunque en el futuro volverá a Oz en
repetidas ocasiones.
Este libro fantástico que, como dije al principio, es un
regalo perfecto para gente de todas las edades (que sepa y guste leer
obviamente) no ha pasado de moda y puede entretener a cualquier amigo de la
fantasía, pero también puede ofrecer a quienes conozcan la historia por alguna
otra versión audiovisual, un retrato más completo del Mago y de su prodigiosa
tierra.
Del Mago de Oz se
han hecho innumerables versiones: teatro, teatro musical, cine, animé, juegos
de video y caricaturas. Ha influido en obras tan variadas como la tragicomedia
australiana “Oz” o la road movie de
David Lynch “Wild at Heart “y el clásico de culto de ciencia ficción “Zardoz”.
Se han hecho series de televisión basadas en los personajes de la franquicia
como la serie de SciFy “Tin Man “o la varias-veces-archivada “Emerald City.” Y a Dorothy y La Bruja las hemos visto en “Sobrenatural
“y en “Once Upon a Time.” Sin embargo, la adaptación que realmente le dio
rostro a los habitantes de Oz, y a Dorothy, es el filme de 1939.
A pesar de que el abusado y trajinado guión (donde metieron
cuchara gente tan variada como el poeta
Ogden Nash, el director George Cukor, el genio alcohólico Herman Mankiewitz,
que un año más tarde ganaría el Oscar por “El Ciudadano Kane,” y hasta el compositor “Yip” Harrburg) descarta mucho
material del libro como el viaje de Dorothy en busca de Glinda y la redención
de Los Monos Voladores, tiene también cambios espectaculares como el que
Dorothy destruya a La Bruja para rescatar al Espantapájaros que se está
quemando.
Debido a que la
fantasía no era un género muy apreciado por la audiencia, el productor Mervin
Leroy y su equipo decidieron reducir los elementos fantásticos, comenzando con
hacer que todo el viaje fuera parte de un sueño/delirio que Dorothy tenía luego
de ser golpeada en la cabeza por un leño durante el tornado. Ese recurso
permitió que se añadiera todo un segmento del filme que nos permite conocer el
trasfondo de Dorothy. Sobre todo su relación con sus tíos y con Hunk, Hickory y
Zeke, los empleados de la granja a los que mas tarde conocerá en su sueño bajo
las identidades del Espantapájaros, El Hombre de Hojalata y El León Cobarde.
Para el espectador de la Era de Depresión, el miedo de los tíos
de Dorothy de perder su granja, el vivir endeudados y el ser víctimas de bullies como Almira, su vecina, que pretende
sacrificar a Toto, eran peligros reales e identificables. Este segmento es
maravilloso, a pesar de estar filmado en blanco y negro. Fue dirigido por el
legendario King Vidor y tiene la gracia de incluir la mejor canción de la
película, “Sobre el Arco Iris” (Over the Raibow) que ganaría un Oscar.
En una época en que filmar a colores era un lujo, la
producción se atrevió a hacerlo y es la combinación de matices las que hacen de
“El Mago de Oz” una gloria visual, un contraste total entre el mundo “real”, en
prosaicos blancos, negros y grises y la exuberancia tornasolada de Oz, donde el
camino es amarillo girasol, donde los caballos son verdes y donde podemos
apreciar el vestidito escoses azul y blanco (tal como lo describe Baum) de Dorothy y las crinolinas color salmón
de Glinda.
Los mejores cambios de la adaptación tienen que ver con el
uso del color desde las zapatillas rojas de Dorothy hasta la piel verdosa de La
Bruja que la hace parecer un reptil. Se cambió el color de las Ruby Red Slippers para que refulgieran
mas que unas meras zapatillas plateadas y ciertamente tienen ese efecto.
Aunque se pensó en Shirley Temple y Deanna Durbin como
posibles interpretes de Dorothy, se termino dándole el papel a Judy Garland,
entonces no tan conocida como las anteriores. A pesar de que Judy se pasó el rodaje
con los pechos vendados para representar una niña (tenía 16 años entonces) “El
Mago de Oz” la lanzó a la fama que merecía por su talento y preciosa voz.
No se puede hablar de esa película sin mencionar la
fantástica banda sonora. Compuestos por
Yip Harburg con música de Harold Arlen (por eso, en broma, yo digo que son
canciones judías) los 19 temas que conforman
el soundtrack son parte de las
razones por las que hay que ver el filme y han ayudado a hacer más memorable “El
Mago de Oz”. Solo de “Over the Rainbow” se han grabaciones de artistas tan
diversos como Bob Marley, Frank Sinatra, Elvis, Placido Domingo, Paloma San Basilio (en español), Lady Gaga y Beyonce. Es el
himno gay (de ahí lo del “arcoíris”) y se ha convertido en un estándar para ser
interpretado por los participantes de realities musicales como “The Voice” y “American
Idol”.
El
Maravilloso Mago de Oz puede encontrarse (en castellano) en Amazon.com en
edición de lujo, de bolsillo y kindle por un módico precio. Y
la versión de 1939 también está a la venta en DVD y Blu-ray.
¿Hay fans de El Mago de Oz en este Reino de Fabulas? ¿Qué prefieren,
el libro o la película? ¿Y qué derivado de la franquicia, sea anime, filme,
serie o libro prefieren? Confieso que me
encantó “Oz the Great and Powerful" (2013)
No soy súper fan de "El Mago de Oz", y no he leído el libro, aunque como casi todo el mundo vi la película de pequeña y me gustó mucho. Debo decir que sí leí el tan cacareado remake hecho desde la perspectiva de la Bruja del Oeste, "Wicked", y no me gustó nada; lo acabé a marchas forzadas y me pareció una historia esperpéntica y absurda. Me quedo por mucho con la historia original.
ResponderEliminar"Oz the Great and Powerful", en cambio, es una película que sí me gustó, aunque no es perfecta porque le quedaron cabos sueltos importantes (por ejemplo, insinuar una historia de amor entre el mago y Glinda cuando en la película original esta relación no se veía por ninguna parte, lo que me hace preguntarme por qué en todas las condenadas películas de Hollywood tiene que haber por narices una trama amorosa incluso cuando no pega con la historia).
Y despues nos quejamos de las burradas que inventan Los Arcángeles, es parte de "la traición a la promesa hecha al público". Así se llama en literatura. Ya se viene una segunda parte de Oz, a lo mejor ahí nos explican en que acabó el romance. A mi me gustó ver a tres de mis actores favoritos (Franco, Rachel y Mila Kunis) en una misma película, me gustó el respeto a la estética del filme original ya que se la copió un poquito, y me encantó el personaje de Theodora con el que me identifico totalmente. Me gustan las historias revisionistas, pero Wicked no me gustó tanto, prefiero pensar que antes de ser verde, La Bruja era como Theodora.
EliminarInteresante y muy completo artículo mi estimada Elena...por ahí leí que la versión más completa de la obra original es un anime japonés...lo buscaré y después les cuento...yo soy fan de la bruja del oeste...pero solo me gusta la de la versión de 1939 las otras me parecen muy equis...las ponen bonitas, sexys y casi perfectas...
ResponderEliminar¿Memo? Si los japoneses han hecho toda una creacion de esta franquicia. Hay versiones del Mago,hay variaciones de la historia, hay creaciones inspiradas en personajes de Baum, ect. Pobre Margaret Hamilton se pasó la vida estereotipada como una bruja verde.
EliminarFijate que justamente es una historia con la que tengo una deuda... mi aproximación fue por medio de un dibujito animado que veía de pequeña, pero al no conocer la historia original no sé hasta que punto era fiel...
ResponderEliminarY, por otro lado, obviamente, me encanta la canción más famosa, en todas sus versiones...
Bueno, aquí encontré el enlace a la serie que te comentaba...
ResponderEliminarhttps://www.youtube.com/watch?v=K8hy29mjy74
No, es que tienes queleerlay verla. Yola conocí adulta. Nunca supe que existíacuando era chica. Y la primera versión que vi era una peli australiana, donde Oz era un a estrella de rock y Dorothy una groupie,asique notemas que sea muy infantil.
EliminarSólo he visto la versión de 1939, me gustó mucho también! El libro nunca lo he leído, pero lo voy a agregar a mi lista :)
ResponderEliminarMe acordé que vi otra versión cuando era chica "Regreso a Oz", recuerdo que en ese tiempo me gustó pero no sé como habrá sido valorada.
Saludos!!
Return to Oz tuvo una sola gracia para mi, fue el debut d Fairuza Balk una actriz muy incomprendida y poco valorada. Lee el libro, es buenísimo.
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